
Uno de los pueblos dentro del fiordo de Oslo que merece la pena visitar es Drøbak. Está cerca de Oslo, como a una media hora en coche y una vez en el, podeis hacer un recorrido por el centro, a través de calles estrechas, y casas de madera.
Aunque actualmente se ha convertido en parte en un pueblo dormitorio, con casi 15.000 habitantes, Drøbak es un pueblo con mucha historia, pues en el está la fortaleza de Oscarsborg, de mediados del siglo XIX. Está fortaleza, que se puede visitar en ferry, fue la responsable del naufragio del barco alemán Blücher, en Abril de 1940, hundido por los viejos cañones de la fortaleza, con entonces casi 50 años de antigüedad, y que los mismos noruegos no sabían si iban a funcionar. El hundimiento del barco que transportaba soldados para la ocupación de Oslo, dio tiempo suficiente a la familia real para escapar y para poner a salvo las reservas de oro.
Pero lo que hace que Drøbak sea especial, es que en el centro está la plaza donde encuentra la casa de la Navidad de Tregaarden que podéis ver en la foto y que algunos noruegos dicen de broma que es la auténtica casa de Papa Noel. Esta casa de Navidad, que realmente es una tienda, se puede visitar todo el año, pero es más bonito hacerlo en estas fechas. Dentro de la casa hay todo tipo de artículos relacionados con la Navidad y con Papa Noel, como velas, servilletas y manteles de Navidad, etc, etc. También está al lado la oficina postal de Julenissen, donde le puedes poner a las cartas o postales un sello Navideño.
En la foto siguiente veis una señal de tráfico que advierte de la presencia de gnomos.
Y yo me vuelvo a casa mañana, así que para todos: ¡Feliz Navidad!